Primer Programa Chileno de Quiropraxia para Kinesiólogos
En el año 2010, la cantidad de estudiantes de Kinesiología superará la cantidad de 26.000 estudiantes de esa carrera de la salud.
Por otra parte, la kinesiología según el Consejo Superior de Educación, ha venido creciendo desde el año 2004 a tasas superiores al 25% por año. Realidad muy similar a la enfermería y otras profesiones de la salud. De mantenerse este acelerado ritmo de crecimiento el año 2015, los estudiantes que inician la carrera de kinesiología supererarán los 50.000, nada hace predecir que esta tendencia se detenga por lo demás.
La ausencia de diversificación en la oferta académica superior en salud, sin duda tensionará los futuros campos laborales de estas profesiones, en particular en la Kinesiología, profesión donde en el 2008 se registraba un tiempo de colocación en plazas laborales estables con un promedio mínimo de un año de espera de los egresados.
Por otra parte, en toda la década pasada, la tasa de absorción laboral en el sistema privado y estatal de kinesiólogos, no superó los 2500 profesionales con contrato fijo y resguardo previsional. Las cifras expuestas hacen prever un escenario muy difícil para la kinesiología si no se flexibiliza el desarrollo humano y profesional de esta profesión. ¿Hacia donde ir? ¿Qué hacer?
La Quiropraxia, profesión que permite la conversión profesional a partir de kinesiólogos en tanto se cumplan los estándares mundiales recomendados por la Organización Mundial de la Salud, ofrece una oportunidad real de continuidad de estudios y mejores expectativas de desarrollo profesional a esos futuros profesionales y a los ya existentes.
Hoy, nadie discute la flexibilidad de los currículums y la capacidad del sistema de educación para reconocer y traspasar competencias profesionales previas a una segunda profesión, en realidad esta es una tendencia mundial que se basa precisamente en el acuerdo de Bolonia de Educación Superior.
Bolonia, a partir de la creación de la Comunidad Europea se transformó en una estrategia en materia de intercambio de personas y desarrollo humano. Especialmente porque lo que se inició como un instrumento universal europeo para el reconocimiento, adaptación e intercambio de profesiones distintas con capacidades similares, hoy también permite la convergencia de esas capacidades y competencias para el reconocimiento de profesiones con un perfil de ejercicio o campo del quehacer compatibles.
A partir de esta realidad, nació un nuevo concepto en el reconocimiento y convalidación de profesiones. Este ya no sería más un sistema inflexible que únicamente reconocía títulos con el mismo nombre y una misma duración de años de formación; mucho menos un problema institucional de las naciones aisladamente.
Bolonia más bien, se transformó en un acuerdo societal global para el establecimiento de políticas transnacionales en relación a migración de profesionales y un referente para los países, en la elaboración de políticas de regulación de sus procesos de identificación de las plataformas tranversales de formación que poseen los individuos y su compatibilización, independientemente de la diferente denominación profesional en distintos países.
Hoy, esos procesos de evaluación de currículums profesionales han ido más lejos aún.
En un concepto de educación para toda la vida, la completación de los perfiles de capacidades y competencias de los individuos, les permite ahora acceder a nuevas profesiones y ejercerlas luego de un adecuado proceso de diferenciación profesional.
La Universidad Central de Chile, en sintonía con la necesidad País que vivirán algunas profesiones de la salud como la kinesiología y otras, ofrece hoy un programa de segunda titulación profesional para Kinesiólogos en Quiropraxia.
Lo interesante de este innovador programa, es que ha generado una gran expectativa por el efecto que este producirá sobre la competitividad de los nuevos Quiroprácticos profesionales, los que sumarán más de siete años de formación. Esto porque el incremento de competencias de esos profesionales acontece en un escenario de saturación del espacio profesional tradicional en salud y, coincide con el creciente interés de nuestra población por las medicinas complementarias.
Es claro que los kinesiólogos que se decidan por la segunda titulación en Quiropraxia, tendrán mayor autonomía profesional y un nuevo espacio, no saturado, para ejercer su nueva dimensión profesional
La Quiropraxia, una profesión de los países desarrollados con grado de doctor clínico que llegó para quedarse entre aquellos que decidan adelantarse a la saturación de su espacio profesional, sin duda representa una promisoria oportunidad para aquellos que decidan seguir su segunda titulación, felíz desafío por ellos..........
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